El 31 de octubre, se recuerda oficialmente a todas aquellas personas que fueron víctimas del golpe militar, la Guerra y la Dictadura Franquista.
Ese día lo fija la vigente Ley 20/22 de Memoria Democrática y esperábamos que, como se hace en otras fechas señaladas, hubiese algún acto institucional que rindiese homenaje a las víctimas del franquismo. No fue así. No hubo ningún acto oficial en Zaragoza.
Lo hicimos desde PAMA. Quisimos recordar públicamente a todas las víctimas que la transición olvidó.
El acto fue en la Plaza del Pilar, delante del Ayuntamiento y frente a la Delegación del Gobierno.
Nos reunimos junto a la placa que recuerda a los concejales y trabajadores del ayuntamiento de Zaragoza que fueron asesinados por los sublevados al poco tiempo de la insurrección y en los primeros meses de la guerra. En esa lista que recoge la placa hay 50 nombres pero fueron algunos más. Todos ellos cargos electos y trabajadores públicos asesinados.
Además de rendir homenaje a todas las víctimas del franquismo, reclamamos el derecho a la Reparación del dolor causado y de la dignidad agredida por los fascistas.
Creemos que es un derecho. En una sociedad democrática no hay argumentos, ni excusas políticas, ni éticas, ni morales, ni religiosas que avalen la negación de este derecho. Mucho menos, como es el caso, si las víctimas lo fueron por defender la democracia y la libertad. Negar ese derecho es la evidencia de la bajeza moral, de la falta de respeto a los derechos humanos, de bajo nivel democrático y del odio sectario.
Ahora, que estamos en democracia, observamos como los herederos ideológicos del franquismo, los negacionistas de este derecho, vuelven a ocupar nuestras instituciones democráticas en las que ni siquiera creen.
Debe ser una obligación ciudadana frenar la involución democrática que quieren imponer quienes detestan la democracia, los derechos y las libertades.
El recuerdo de las víctimas del franquismo nos obliga a proteger y fortalecer nuestras instituciones democráticas, para que la intolerancia, el autoritarismo y la injusticia nunca vuelvan.
Tenemos la responsabilidad de educar a las generaciones futuras sobre todo lo que aconteció en el pasado en nuestro país, para que de este modo puedan entender que es esencial la libertad, la igualdad y el respeto para una convivencia pacífica, y por ello volvimos a reivindicar que se integren contenidos de memoria democrática en los programas educativos, que se promuevan iniciativas de investigación y que se respalden proyectos culturales y académicos que ayuden a preservar la historia de las víctimas del franquismo.
Agradecemos profundamente su participación a las personas y representantes de organizaciones que nos acompañaron. ¡¡Muchas Gracias¡¡
Por ellos y ellas, por las libertades y derechos que defendieron, debemos continuar. “Por que fueron somos, porque somos serán”
Memoria, Verdad, Justicia, Reparación y Derecho de No Repetición


